La constelación de Orión es una de las más conocidas debido a su espectacularidad y su visibilidad. Es fácilmente reconocible por sus tres características estrellas conocidas como las “Tres Marías”, las cuales forman el cinturón de Orión. Esta constelación se puede observar desde la mayoría de las latitudes, especialmente el día 15 de diciembre, cuando mejor se ve. Algunos de los objetos interesantes que podemos encontrar en ella son: la nebulosa de Orión, la nebulosa de Mairan y la nebulosa Cabeza de Caballo. Esta constelación tiene 10 estrellas: Algebar, Alnilam, Altinak, Bellatrix, Betelgeuse, Heka, Meissa, Mintaka, Rigel y Saiph. Las más importantes de éstas son Mintaka, Altimak y Alnilam, las ya nombradas “Tres Marías” unas grandes estrellas azules que coinciden con la alineación de las pirámides de Giza en Egipto.
Según la mitología griega, Orión era un gigante de semejante altura que en las zonas más profundas del océano sólo lograban mojar su cintura. Tras un primer matrimonio fallido a causa de su jactancia, Orión se enamoró de una princesa griega, cuyo padre lo cegó viendo la perdición de su hija. Gracias a un oráculo que le recomendó que mirase el sol al amanecer, el gigante recuperó la visión. Cuando vio a Aurora, la diosa del amanecer, se enamoraron. Todo iba bien hasta que Orión fue picado por un escorpión, se sintió enfermo y murió. Su mujer, para honrarlo, lo convirtió en una constelación, y protegerlo de su enemigo, se eleva por el este mientras su enemigo el Escorpión se pone por el oeste. Por eso Escorpión y Orión jamás son visibles en el mismo momento.
